Que levante la mano el que quiera adquirir hábitos saludables y tomar
helado sin calorías. Seguramente sos uno de los que dice: ¡yo! y de
los que se pasan horas navegando por distintas aplicaciones en ese
afán de calcular calorías, ver cuánto pesa cada alimento y buscando
rutinas de ejercicio físico.
Las soluciones digitales llenan de esperanza a todos cuando en el
buscador ponemos “salud digital”, Sin embargo, ya es hora de cambiar
esa práctica un tanto nociva.
Hoy en día tratar una enfermedad o mejorar la salud requiere de
nosotros una actitud proactiva y “hacer más”. Entonces te preguntás:
¿qué más podría hacer? Bueno, podrías empezar a contar las calorías
que aporta cada comida, controlar la ingesta de alimentos, recordar
tomar tu medicamento, anotarte en un gimnasio. ¿Todo eso? ¡Sí, todo
eso y otras cosas más! Como salir a andar en bicicleta, prestarle
atención a tu carrera profesional, no dejar de visitar a tus padres,
invertir lo que ahorrás, sacar a pasear al perro todos los días.
¡Uuuuf! ¡Cuánta demanda de actividades! Y sí, se espera que hagas de
todo, aunque contradictoriamente el poder de la salud
digital se basa en la promesa de “hacer menos”.
La diabetes parece ser sinónimo de malabarismo permanente,
porque necesita de una atención precisa (y aun así, a veces, no se
puede predecir): administrar los medicamentos, escribir o registrar
cada dosis, ser constante en el monitoreo de azúcar en sangre, prestar
atención a la dieta y a la actividad física. En todo este sin fin de
actividades están los médicos y los profesionales de la salud que
guían y ayudan al paciente, pero que muchas veces no cuentan con la
totalidad de la información o no es precisa y confiable.
Aplicadores de insulina inteligente
Son dispositivos que ayudan a reducir la sobrecarga cotidiana.
Seguro te preguntás: ¿esto es real? Y la respuesta es: sí, lo es, ya
que al registrar de manera automática la cantidad de insulina y el
momento de aplicación, las personas que tienen diabetes tienen una
tarea menos para hacer. O sea que los libros de registro manuales
pasan a ser reemplazados por información exacta y fiable.
Lo que leés hasta acá puede parecer simple, pero aun así, tiene un
impacto muy significativo. Hace un tiempo -en Suecia- se realizaron
estudios en pacientes con diabetes tipo 1 y se observó que los
aplicadores inteligentes de insulina podrían mejorar el tiempo de
azúcar en sangre en rango normal en hasta dos horas, indicando un
mejor “registro” de datos.
La salud es urgente y está llena de acciones que apremian. Lo que se
necesita son soluciones digitales, aparte de dispositivos simples de
los que, tal vez, no se los recuerde el próximo mes. Se precisan
soluciones que ayuden a dar forma y a dejar una huella positiva en la
sociedad brindando -de este modo- una vida más saludable y más feliz
hoy, ahora, no mañana. Por esta razón creemos que estamos en un
momento de una gran oportunidad para pensar de manera distinta sobre
lo que se le pide al paciente: preguntar menos y obtener más información.
Si logramos todo esto y si aplicamos los cambios, el helado no
tendrá calorías, las gaseosas “light” serán sanos brebajes en los que
los azúcares no serán reducidos sino directamente no serán. Y la buena
salud será una realidad.