Una dieta saludable
y más ejercicio son, por lo general, las primeras cosas que se le
recomienda que pruebe en las primeras etapas de la diabetes tipo 2.
Pero incluso a medida que la enfermedad evoluciona, el ejercicio sigue
siendo una parte importante del manejo de la diabetes.
El ejercicio regular puede ayudarlo a controlar sus niveles de
azúcar en sangre, perder peso y mejorar su salud física y mental.
Incluso un pequeño aumento en la actividad física puede marcar una
diferencia. Si no ha estado activo durante un tiempo, comience con
solo 5 a 10 minutos de ejercicio por día y, luego, agregue unos
minutos cada semana hasta alcanzar su objetivo.
Cuando comience una nueva rutina, busque una actividad que se adapte
a usted. Esto hará que sea más probable que la mantenga y disfrute de
los beneficios de un estilo de vida activo.
Estas son algunas ideas para las actividades de bajo impacto que lo
ayudarán a comenzar.
- Las actividades de estiramiento y equilibrio, como pilates ,
aumentan la flexibilidad y la fuerza, y pueden prepararlo para otras
actividades, como natación.
- El tai chi desarrolla la fuerza
de la parte superior del cuerpo, reduce la rigidez y combina la
conciencia plena para ayudarlo a mantenerse concentrado.
- El
baile es una actividad aeróbica: aumenta la frecuencia cardíaca,
quema calorías y grasas, y puede apoyar la salud
cardiovascular.
- Hacer ejercicio con pesas puede desarrollar
fuerza y ayudar a bajar de peso. Si no tiene experiencia, no lo
intente sin supervisión.
- Caminar o hacer senderismo son
maneras agradables de pasar tiempo con amigos o familiares;
simplemente asegúrese de usar los zapatos adecuados.
- La
natación es suave para las articulaciones y trabaja todos los grupos
musculares principales.
Independientemente de la actividad que elija, lo que es importante
es que incorpore tanto movimiento como pueda a su día. Simplemente
recuerde hacer ejercicio de manera segura; consulte con su médico
antes de comenzar cualquier ejercicio más extenuante que un
programa de caminata.