El diagnóstico ya es un hecho: diabetes tipo 2. Ahora lo que sigue
es empezar a activar alertas y comenzar a tomar medidas que te ayuden
para que tu salud esté bajo control y, de este modo, puedas evitar
complicaciones graves. El camino que se inicia es hacerte cargo de la
situación aprendiendo, de a poco, sobre la enfermedad y las distintas
maneras de manejarla.
Todas las patologías tienen su fase o
estadío, y como tal, la diabetes tipo 2 también tiene el suyo. Por
eso, lo que hagas dependerá del momento en el que estés clínicamente.
Por ejemplo, en los primeros estadíos, o en lo que se
llama prediabetes, el control del azúcar en sangre lo podés ir
haciendo con ayuda de una dieta saludable y actividad física.
Sin embargo, la diabetes tipo 2 es una enfermedad de carácter
progresivo, y una vez realizado el diagnóstico el paciente debe
recibir antidiabéticos orales, agonistas del receptor de GLP-1 o
insulina. Con este tratamiento los niveles de azúcar se pueden
mantener en un rango saludable.
Tu salud emocional es importante
La diabetes tipo 2 necesita que aprendas a manejar muchos aspectos
de tu cuerpo, claro. Pero además tenés que aprender a reconocer los
efectos que produce en tu salud emocional. El diagnóstico de diabetes
puede resultar estresante y abrumador, pero aún así es fundamental que
no ignores las emociones negativas porque hacerlo podría repercutir
negativamente en aspectos físicos y emocionales. ¡Pedile a tu médico
que te oriente en este proceso!
Tanto el factor emocional como la salud física están relacionados
con la diabetes, por eso es de vital importancia que te ocupes de ellos.
Diabetes tipo 2 y salud emocional
-
Depresión/ansiedad: Es normal que a veces te sientas
deprimido, pero esos sentimientos de tristeza o desesperanza deben
abordarse porque pueden impedir un correcto autocuidado de tu
enfermedad.
-
Estrés: El estrés hace que los niveles de azúcar en sangre
suban, ya que tu cuerpo libera los suministros de glucosa
almacenados que van al torrente sanguíneo para prepararse para la
reacción de “lucha o huida”.
-
Problemas para dormir: Los malos hábitos de sueño y el sueño
insuficiente también pueden afectar negativamente tus niveles de
azúcar en sangre.
Podés controlar la diabetes recibiendo apoyo del equipo médico
tratante, de tus familiares y de tus amigos. Pedí ayuda, hacerlo no
quiere decir que seas débil, al contrario, es un signo de fortaleza
porque significa que estás activo controlando la enfermedad.
"Es nuestra salud física, nuestra salud mental, nuestra
hipoglucemia, nuestra hiperglucemia… Estas son las cosas importantes
para las personas con diabetes" Ken Tait
Manejo del estrés
Cuando tenés diabetes tipo 2 el estrés es habitual y, aunque no lo
creas, tenés algo para hacer en relación a esto. Hay muchos pacientes
que viven con esta enfermedad y que pudieron establecer una conexión
entre el estrés y los valores de azúcar en sangre. ¿Cómo lo hicieron?
De una manera muy sencilla: aprendieron a disminuir los niveles de
estrés con el fin de mejorar el control del azúcar en sangre y su
salud en general.
Es decir, ¡encontraron la relación entre el
estrés, los valores fluctuantes y la hipoglucemia!